
La doctrina de la inspiración de la Biblia, quizás sea la más relevante para una persona que se dice ser cristiana, un creyente depende completamente de lo que está expuesto en la Escritura; por lo tanto, debe estar convencido de que la Biblia es la Palabra de Dios, y a través de una convicción fuerte de lo que ella enseña, crecer por medio del Espíritu Santo, en los aspecto prácticos de la piedad.
Lo primero que se debe tener en cuenta a la hora de hacer un estudio bíblico, sea básico o sea profundo, es la doctrinad de la inspiración de las Escrituras. Sin un buen conocimiento de la doctrina de la inspiración de las Escrituras, el cristianismo sería como aquella casa que es construida sobre la arena, la cual se cae con cualquier soplo de viento, pues no tiene una base sólida de dónde agarrarse.
Por esta razón la confesión de fe bautista de 1689, empieza hablando de la inspiración de la Biblia en su primer capítulo diciendo: “Las sagradas Escrituras constituyen la única regla suficiente, segura e infalible de todo conocimiento, fe y obediencia salvadores”[1].
Básicamente, La doctrina de la inspiración cumple la función de asegurar que la Biblia es verdaderamente la Palabra de Dios, y por ende, hace que la misma sea autoritativa. Ahora bien, se sabe que la inspiración del Antiguo Testamento se evidencia, en que muchos autores del Nuevo Testamento se apoyaron en versículos del Antiguo Testamento. Pero ahora la pregunta es: ¿Cómo saber que el Nuevo Testamento es inspirado y autoritativo?
Para responder esta pregunta, se ha propuesto un objetivo general en este artículo; básicamente se mostrará la autoridad que tiene la Biblia partiendo de la doctrina de la inspiración, y mediante el siguiente planteamiento:
- Definición de inspiración.
- Inspiración del Nuevo Testamento
- El objetivo de la inspiración.
Así que, conociendo los objetivos que se van a llevar a cabo, es posible dar paso al primer punto:
- Definición de inspiración
Uno de los versículos que más puede ayudar a definir esto de la inspiración de las Escrituras es 2 Timoteo 3:16 donde dice: Toda la Escritura es inspirada por Dios. Para una correcta comprensión de este pasaje, se procederá a explicar palabra por palabra.
- Inspiración:
Primeramente, es necesario dejar claro lo que Pablo está queriendo decir con inspiración de la Escritura. Cuando se echa un vistazo al idioma original, es posible notar que la palabra utilizada para inspiración, que en griego estheopneustos, hace referencia a algo “divinamente soplado”[2]. Esta expresión divinamente soplado apunta a algo que es soplado por una “divinidad suprema; deidad; Dios”[3].Por esto es que Ramsbottom dice esto respecto a la inspiración: “la Biblia salió del aliento de Dios. Dios con su aliento produjo la Biblia”[4].
Así que, teniendo en mente que cuando Pablo habla de inspiración está hablando de algo que es divinamente soplado por Dios, es posible dar paso a investigar lo que Pablo está queriendo manifestar cuando dice: Escritura. Esto da paso a nuestro segundo punto.
- Inspiración del Nuevo Testamento
Antes de cualquier cosa, es importante notar que Pablo, en 2 Tim 3:15-16, hace una distinción entre Sagradas Escrituras (v.15) y Escritura (v.16). Aunque no parezca, hay una diferencia entre estos dos términos y es necesario aclararla.
- Sagradas Escrituras:
Cuando Pablo está hablando de Sagradas Escrituras, Pablo está haciendo referencia al Antiguo Testamento. Para llegar a esta conclusión es necesario mirar algunos antecedentes, por así decirlo, para poder tener claridad.
Es importante recordar que Pablo está escribiendo esta carta a Timoteo, uno de los más conocidos compañeros y colaboradores de Pablo (Hch 16:1-3). La madre de Timoteo era judía y su padre era griego, “lo que significa que Timoteo fue criado en las Escrituras”[5].
William Hendriksen habla sobre la educación teológica que se le daba a los niños, hijos de judíos. Hendriksen dice: “El israelita piadoso enseñaba a sus hijos porque Jehová le ordenaba hacerlo. Instruía a sus hijos con respecto a las Palabras y hechos de Dios, registrados en las Sagradas Escrituras”[6]. Esta idea, de hecho, es posible encontrarla en el Antiguo Testamento (Éxodo 10:2; Deuteronomio 4:9).
Es obvio que en la niñez de Timoteo aun no existía el Nuevo Testamento, y por tanto, él creció aprendiendo el Antiguo testamento. Así que, Timoteo, desde niño fue instruido en las Palabras y hechos de Dios que se encuentran en el Antiguo Testamento, y es por esto que se conoce que cuando Pablo habla de Sagradas Escrituras, está queriendo hacer referencia al Antiguo Testamento.
Las Sagradas Escrituras eran tan Sagradas o tan Divinas que incluso Jesús las usó al momento en que fue tentado por Satanás (Mateo 4:1-11), citando los siguientes versos del Antiguo Testamento: Deuteronomio 8:3; 6:16; 6:13. Entonces, que quede claro que en este versículo en particular, cuando Pablo habla de Sagradas Escrituras, se está haciendo referencia al Antiguo Testamento.
- Escritura:
Por otro lado, cuando Pablo está hablando de Escritura en el v.16, Pablo está haciendo referencia a todo aquello que sea digno de ser llamado inspirado, es decir, no solo los Escritos del Antiguo Testamento, sino también las Escrituras del Nuevo Testamento que en aquel tiempo se estaban desarrollando apenas.
Cuando se habla de Escritura, se hace uso de la palabra griega graphe, lo cual traduce “santo Escrito”[7]. Cuando se habla de santo Escrito se está hablando justamente de libros que tienen un origen divino, de aquellos libros o de aquellos Escritos que fueron exhalados por Dios, inspirados por el Espíritu Santo.
Es aquí donde entonces se puede entender que, cuando Pablo habla de toda la Escritura, está hablando de todos y cada uno de aquellos libros inspirados, que quizá aún no habían sido escritos, pero que en un futuro lo iban a ser, para luego ser considerados como exhalados por Dios, y posteriormente, ser agregados al canon de las Escrituras.
Así que, Pablo no solo dice que el Antiguo Testamento es inspirado, sino que también apunta a todas las cartas que hoy se encuentra en el Nuevo Testamento ya establecidas. Esto indica que el Nuevo Testamento también es Palabra autoritativa de Dios.
Posteriormente, en 2 Pedro 3:15-16 se puede notar que el apóstol Pedro se refiere a las epístolas de Pablo dándole el título de Escritura, o sea, Pedro admite que los escritos de Pablo (los cuales conforman la mayor parte del Nuevo Testamento) son Escritos de origen divino, y por ende, autoritativos.
Así que, luego de conocer el significado de inspiración y luego de mostrar que Pablo apunta a la inspiración de los Escritos del Nuevo Testamento, cabe preguntar: ¿Qué significa que un libro sea exhalado por Dios? Esta pregunta la responderemos en la segunda parte de esta meditación: El objetivo de la inspiración.
[1]Confesión de Fe Bautista de Londres 1689, Capítulo: I, Artículo: I.
[2] James Strong, Nueva concordancia Strong Exhaustiva (EE.UU: Caribe, 2002), 98.
[3] Strong, Nueva concordancia (EE.UU: Caribe, 2002), 98.
[4] B. A. Ramsbottom, Doctrinas bíblicas simplemente explicadas (Londres: Gospel Standard Trust Publications, 1986), 9.
[5] Joel R. Beeke et al., Biblia de estudio Herencia Reformada (Edinburgh: Reformation Heritage Books, 2018), 1777.
[6] William Hendriksen, Comentario al Nuevo Testamento 1-2 Timoteo y Tito, trad. de Pedro Vega (Grand Rapids: Libros Desafío, 2006), 241.
[7] Strong, Nueva concordancia (EE.UU: Caribe, 2002), 51.

Kevin Colina Solano
Colaborador
Soy cristiano por la gracia y misericordia del Señor, actualmente residenciado en Medellín Colombia, ciudad donde adelanto estudios de teología en el Seminario Reformado Latinoamericano. Hago estos escritos para la edificación de mis hermanos en la fe. Comparte para que el mensaje llegue a más personas.
Su servidor